El precio internacional de la soja trepando día a día y llegando ayer en el mercado de referencia de Chicago a U$S 550,15 la tonelada, se constituyó en la noticia del día. Sin embargo la zafra que para nuestra zona comenzará a principios de la semana próxima, depende de la evolución del tiempo ya que están anunciadas lluvias y además la humedad es elevada todavía.
En el corazón agrícola la soja no supera los 2.000 kilos y hay pocos porcentajes de humedad que rondan el 20%. Para poder exportar se necesita estar por debajo del 14% aunque estiman que al final la zafra tendrá un cierre positivo. Se siguen viendo rendimientos desparejos que van desde 1.000 kilos por hectárea hasta los 2.500, todo como consecuencia del gran déficit hídrico que complicó la maduración en el momento del llenado de grano. Salvo el eje de la ruta 14 donde se ven rendimientos más altos, el resto no escapa a la disparidad. Más al norte, en Paysandú y Río Negro, se están registrando rendimientos un poco más estabilizados, porque captaron un mejor régimen de lluvias.
Para poder hacer frente a la siembra, unos cuantos productores hicieron ventas anticipadas, por lo que el precio que es récord en varios años no les terminará beneficiando.
Mañana comenzará a disminuir el viento y se anuncia sol, pero en la noche volverá a desmejorar y llegarán lluvias que se moverán por el territorio durante el sábado, según algunos de los pronósticos que manejan promedios de lluvia de entre 5 y 10 milímetros.
Otros cereales continuaron también su racha positiva por séptima rueda consecutiva y el trigo cotizó a 247,38 dólares y el maíz 246,28, el precio más alto de los últimos ocho años.